Centrando la oferta

Las prioridades de los CIOs cambian y las ofertas han de adaptarse, por eso Softtek , compañía que inventó hace 11 años el modelo y el concepto Nearshore, una propuesta de valor original basada en la proximidad y misma zona horaria; la compatibilidad cultural y facilidad para hacer negocios así como en reducción de costes, tras analizar los retos a los que se enfrentan las áreas de TI en el nuevo panorama económico en el que prevalece la escasez de talento en Tecnologías de la Información, un incremento de los costes de servicios y el fuerte impacto en la desaceleración de la economía española en los negocios, concentra su compromiso en “reducir la complejidad de la administración de servicios de TI, optimizar costos y apoyar la globalización de las operaciones de Tecnología de la Información , contribuyendo con ello a evolucionar los negocios de nuestros clientes”, según Alejandro Camino, vicepresidente de Marketing y Comunicación de la compañía .

Las prioridades de los CIOs

La innovación en una constante en las consultoras TI que no han de dejar de lado si no quieren verse demasiado afectadas por la crisis. “La actitud de innovar no se improvisa y es importante que las empresas la lleven en los genes. ¿Por qué algunas empresas por mucho que lo intentan no lo consiguen? Una vez se consigue, la empresa adquiere una inercia que le permite estar renovando su oferta de forma continua, y esto marca la diferencia con el resto del mercado. Sencillo en concepto, complejo en ejecución. De hecho, una de las áreas de negocio de VASS es Innovación Tecnológica, que desarrolla una amplia labor de estudio, análisis y captación de nuevas tecnologías para adelantarse al mercado y dar respuesta a la demanda de nuestros clientes”, afirma Javier Latasa, director general de VASS.

Otra de las tendencias en las que se concentra esta consultora para asumir una posible bajada de la demanda es el modelo distribuido de trabajo, donde un equipo trabaja con el cliente mano a mano, pero el desarrollo luego se ejecuta en otra oficina, ciudad o incluso continente, ya que el trabajo se reparte por grupos especializados. “Las empresas de servicios debemos adaptar nuestra oferta a este modelo y esto implica cambios en la forma de trabajar, en los equipos, la tecnología y la metodología, entre otros aspectos”.

“El mercado de las consultoras se está viendo cada vez más especializado” señala Fernando Cruz, director general de Synotion España. Antonio Crespo, director general de Quint Wellington Redwood para Iberia, confirma esta teoría añadiendo: “El mercado de la consultoría está viviendo una rápida evolución, síntoma de que estamos alcanzando mayor madurez en nuestra propuesta de valor. Por un lado, se requieren servicios más especializados, y muchas compañías huyen de las consultoras cuyo posicionamiento pretende ser el saber “casi todo de casi todo” y prefieren aquéllas que poseen una mayor especialización. Por otro lado, y aunque a priori parezca contradictorio, las competencias de los profesionales son cada vez más interdisciplinares, especialmente en el ámbito de la consultoría tecnológica, ya que una misma actividad requiere de conocimientos y competencias en distintas áreas”.

Think-Go! ha sido una de las últimas consultoras que han aterrizado en nuestro mercado, nacía a finales de 2007 con las ideas muy claras y una oferta innovadora, tal y como nos cuenta Javier Mateos, su director general: “En Think & Go! hemos detectado que en realidad se prestan muchos servicios profesionales que no inciden en un resultado claro en el negocio y esto a la larga no es beneficioso ni para el cliente ni para nosotros. Estamos huyendo de la prestación de servicios que, aunque dan un volumen grande de negocio para muchas consultoras, en realidad aportan muy poco al margen y además traen consigo grandes problemas para la gestión de las expectativas de los profesionales”.

Mateos se atreve a señalar algunos de los ‘huecos’ que detectaron en el sector de las consultoras y que les impulsaron a presentarse con una oferta muy valiente y comprometida en un momento crítico: “Los clientes ya no contratan sólo por el ‘prestigio’ de una marca, ahora quieren saber quién les va ha hacer realmente el trabajo y están cansados de pagar por un manager y recibir el asesoramiento de un junior; quieren empresas que se comprometan en la solución de un problema que tienen y no en que les cobren unas tarifas astronómicas por realizar reflexiones estratégicas con ellos y que luego se les presente un bonito informe o se les implante una impresionante herramienta tecnológica. Ahora quieren que se les diga qué tienen que hacer y además que se lo hagas tú y te ‘mojes’. Por último, los profesionales están hartos de que les vendan motos con carreras impresionantes, títulos rimbombantes, para que luego comprueben que ‘son el mismo perro con distinto collar’, como nos decía el otro día un candidato. Quieren algo nuevo, con frescura, que se mojen con ellos, y además que se les respete como profesionales y como personas”.