Carlos Fontán Allén, director de Marketing de Valor de HP Imagen e Impresión

IT CIO.es. Y como desafíos, ¿qué objetivos tiene el grupo de Imagen e Impresión de HP para esta nueva tecnología?

C. F. A.: El gran reto es que los clientes comprueben los beneficios que aporta esta tecnología y, claro, que les convenza. Estamos muy esperanzados, a pesar de que las grandes organizaciones no son tan ágiles como las pymes a la hora de tomar decisiones sobre TI. La estrategia es que vean funcionar las Edgeline, que las prueben en una sala de demostraciones o en su propio entorno y que determinen si cumplen sus expectativas. Estamos convencidos de que va a ser así. 

IT CIO.es. ¿Qué argumentos son los más valorados por la gran empresa a la hora de tomar esas decisiones sobre impresión? ¿Precios y costes son los principales?

C. F. A.: Se está dando mucha importancia a los aspectos medioambientales. Muchas empresas tienen planes de protección del medio ambiente y las impresoras están implicadas en lo que respecta a consumibles y gasto de papel. Precisamente, el aspecto medioambiental es algo que se puede optimizar en un entorno de impresión, no todo son costes aunque también influye en ellos: si se reducen los consumos innecesarios de papel, bajan los costes y se protege el medio ambiente.

También se valoran positivamente las posibilidades de integración con el sistema de información de la compañía, incluso de los aplicativos, de forma que un documento digitalizado por la Edgeline no precise procesos intermedios para ser gestionado por una aplicación o enviado a la red. Es un factor que aprecian mucho las áreas de TI y las de compras.

Finalmente, la gestión de consumibles es algo que subrayan, a través de aplicaciones que, como el HP Web Jetadmin, se encargan de alertar de que la tinta se está acabando y, automáticamente, envía una orden de compra para que el proveedor lo reponga.

IT CIO.es. ¿Y en cuanto a la complicada gestión del uso de color en la impresión?

C. F. A.: La gestión del uso del color ya no puede hacerse con prácticas radicales como las que restringen la utilización de impresoras en color. Las empresas evalúan los efectos que puede tener el imprimir todo en monocromo y puede que no compense con lo que se ahorran. HP lo que plantea es el control de acceso al color que, en síntesis, es poder seleccionar por usuario el que puede imprimir en color y, entre ellos, las aplicaciones que tienen acceso al color.