El smart working desbancará al teletrabajo y, gracias a la tecnología, está al alcance de todas las empresas

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), sólo el 27% de las empresas apuestan por el teletrabajo, a pesar de que un nuevo concepto invade el mercado profesional y debido a las posibilidades que ofrece, se le augura un gran futuro: el 'smart working'.

El 'smart working' está entrando con fuerza y nuestro país tiene las posibilidades tecnológicas para poder implantarlo con seguridad y que todos salgamos beneficiados. Este “trabajo inteligente” desbancará al teletrabajo, y gracias, a los avances tecnológicos, todas las empresas pueden ofrecerlo”, asegura Fernando de Águeda, fundador de Gluppi, la marca de Colabora Comunicaciones Unificadas.

Así, frente al teletrabajo, el 'smart working' destaca por:

• Internet es clave en ambos casos - Como en el teletrabajo, en el 'smart working', las tareas que se requieren se pueden realizar desde cualquier lugar. En definitiva, desde el espacio que el trabajador prefiera, siempre y cuando cuente con una buena conexión a Internet.
• Nuevo trabajo: por objetivos - En el teletrabajo por lo general, se dedica un horario definido, de la misma forma que en una oficina tradicional. Sin embargo, un smart worker no trabaja por horas, sino por objetivos.
• No hay control - Al trabajar por objetivos, el control por parte del empresario no se lleva a cabo a partir de unas determinadas horas trabajadas, sino a través de los objetivos cumplidos o las tareas terminadas.
• No es solo para trabajadores autónomos - Aunque es más común en el ámbito de la colaboración freelance, cada vez es más habitual en el mundo de los empleados tradicionales.

Por otra parte, el 'smart working' ofrece multitud de  ventajas a  los trabajadores. Entre ellas destacan:

• Más productividad - Posible gracias al sistema de trabajo por objetivos. Un smart worker está trabajando las horas que debe, ya que dedicar más tiempo no significa que se haga más. En este caso, el trabajador intenta alcanzar los objetivos lo antes posible para disfrutar de su tiempo libre o realizar otras tareas.
• Mejor conciliación - Un smart worker tiene la posibilidad de gestionar sus horas de trabajo según sus responsabilidades familiares.
• Menores costes - Con el nuevo sistema se reducen los costes de desplazamiento al puesto de trabajo diariamente, tanto en tiempo como en dinero. Trabajar desde casa o desde cualquier lugar con acceso a Internet, supone ahorros importantes. Además, también suponen economías para la empresa, ya que no tiene que asumir los gastos de espacio, energía agua, calefacción, etc, que supone tener al trabajador de forma presencial.
• Mucha más libertad - Decidir dónde y cuándo trabajar genera bienestar en el empleado, en el autónomo o colaborador. Y esto, por supuesto, supone mejores resultados laborales.

“Todas las ventajas de este nuevo sistema laboral derivan de poseer una buena plataforma de comunicación e intercambio de datos entre los trabajadores. Sistemas como las comunicaciones unificadas facilitan este nuevo concepto de trabajo. El “trabajo inteligente” es un sistema que se adapta a las necesidades comunicativas de las empresas del siglo XXI“, concluye Fernando de Águeda. Más información en www.gluppi.com